
22 Abr Lara91k conecta el indie y el trap
Nacida como Lara Artesi en 1991 (y de esa combinación, su nombre artístico), no sería justo nombrarla como revelación ni como artista nueva porque su recorrido no lo es. Y Como antes, su flamante debut solista, viene a sintetizar su identidad sonora, que podría definirse como la de una cantautora sensible en tiempos de trap. No le teme al autotune ni a los beats programados, pero su relación siempre es con la canción, con las armonías nacidas desde el piano o la guitarra.
Así, Como antes, compuesto por 20 canciones que incluyen feats con Duki, Santiago Motorizado, Paco Amoroso, Dinastía y Saramalacara, es una muestra de todo lo que es capaz de hacer. Su enfoque de la música urbana es siempre de una manera espectral, teñido de un sonido etéreo que parte de su voz y se permea sin importar si se trata de un reggaetón, un dancehall, un trap o alguna incursión r&b. No se trata de un disco de ejercicios de género sino de un viaje por la pista de baile para corazones débiles que también pueden divertirse.
“Hice un disco porque aguante hacer discos”, dice Lara91k sobre su relación con los trabajos de larga duración. “Este proyecto lo empecé en 2019. Es normal que lo haga, no es que antes no lo quería hacer. En un disco te enroscás más y se trabaja más sobre quién es uno. Quería mostrar la película completa de quién soy. Cuando aparecí, me decían ‘Lara la trapera’ y yo tenía de todo”.
Aunque ella no reclame ningún trono, es posible que haya sido una de las primeras cantantes en introducir el autotune como efecto (y no como herramienta de corrección) en la música argentina. Como parte de Coral Casino, el dúo que formó con Orodembow, se enamoró del efecto luego de escuchar a Kimbra y lo utilizó en algunas de las canciones del EP $lytherin. ¿El año? 2014. Faltaban tres años todavía para que el trap comenzara a sonar en todos lados con “She Don’t Give a FO”. “Me siento pionera”, dice desde un lugar mucho más humilde de lo que suena el textual. “Por ahí he influido a artistas como Duki, que vienen y te dicen que te escuchaban en Coral Casino, pero nunca tuvimos llegada a la masividad. Tocábamos en festivales, nos unían al indie porque nadie entendía bien lo que hacíamos. Ellos tenían toda la movida de las batallas y lo explotaron, ahí se popularizó la movida”.
Ahora que sí vive de la música, sabe qué la tensión entre ir a la fórmula y quedarse con los intereses propios es constante pero solo puede tener como dominante la segunda opción. “Si querés vivir de la música y hacer guita, hoy hay una forma muy clara, un camino que está funcionando. ‘Me hago unos temas así y está’, sencillo”, explica. “Pero capaz un tema que ni pensabas se hace hit, por eso hay que partir del deseo real, de no ir a la fórmula. Es raro cuando no es orgánico. Este disco es un regalo a mi alma, no lo hice pensando en un hit. Igual hay mil hits diferentes. Estamos intentando educar los oídos tirar otras datitas. No sé si es nuevo lo que hago, es la que me sale a mí, pero con este disco no sé si intenté hacer algo nuevo, hice música”.
Sorry, the comment form is closed at this time.